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miércoles, 23 de marzo de 2022

ORÍGEN DE LOS DULCES CASEROS

                       A bebedor fino después del dulce un vino. Refrán español.

Nos encanta disfrutar un rico dulce casero o un postre después de la comida, también en algún momento del día si es un goloso o tiene un antojo ocasional. Abundan los dulces de preparación casera que desde nuestras abuelas y generaciones antes que ellos elaboraban y que llegaron hasta nosotros.

Colombia es un país con una riqueza gastronómica importante, con disponibilidad de frutas durante todo el año lo que nos lleva a ser un país con una amplia tradición en dulces autóctonos o típicos como los quieran llamar en cada región.

Colombia tiene una dulce historia contamos con una cantidad de recetas de dulces caseros pero la llegada de grandes fabricas de dulces ofreciendo atractivas presentaciones ha sido la causa de ir dejando de lado los dulces de toda la vida prefiriendo los dulces industrializados. 

Otra de las las causas de que las recetas caseras han ido desapareciendo ha sido que con el paso del tiempo es muchas personas piensan que la cocina es cosa de abuelas, pero no es así y menos con el auge que ha tenido la cocina en los últimos años.

La creatividad de los colombianos han permitido el desarrollo de dulces de todo tipo. No podemos llamarlos postres porque el postre es más elaborado y el dulce casero es generalmente con frutas en almíbar algo más simple pero delicioso.

En Colombia y Latinoamérica tenemos un diversidad de postres que tienen origen en España se adaptaron muy bien en nuestra tierra y en cada país donde llegaron, la riqueza y diversidad se puede apreciar en sus dulces caseros o artesanales como últimamente los llaman.

¿Cómo se originaron los dulces colombianos? Debido al pasado colonial los dulces han existido desde 1541después de la fundación de las primeras ciudades por los conquistadores aunque muchos lo desconocen.

Por otro lado con las inmigraciones en siglo XIX de árabes y turcos que se asentaron en la Costa Atlántica, trajeron almendras, maní y miel y muchos otros ingredientes, los franceses, e italianos, también contribuyeron  trayendo al país sus costumbres, sus gastronomía y sus productos, toda ésta fusión le otorgó a los dulces colombianos su diversidad.

 A lo largo de la geografía colombiana tenemos muchas golosinas y diversos dulces con ingredientes de cada región generalmente con panela, azúcar y frutas propias de cada lugar. Los almíbares de frutas o dicho de otra manera los dulces de fruta con almíbar es herencia árabe, libanesa, judía y turca.

Sin lugar a dudas dicen los expertos que fue el departamento de Antioquia el referente nacional en el ramo de la pastelería y repostería, seguido por Bogotá, no queriendo decir que en el resto de regiones del país no tengan buenos productos. Cada región aporta elementos propios y según quién los prepare aporta su toque personal.

Todos crecimos consumiendo dulces caseros, tortas, pasteles que horneaban, las abuelas, era un sin fin de delicias que preparaban con mucho amor, no solo alimentaban el cuerpo sino el alma, hoy después de que esos años maravillosos quedaron atrás solo puedo recordar con nostalgia la tradición y el legado que nos dejaron. 

Es imposible para mi no apropiarme de las recetas tradicionales y darlas a conocer como hicieron las generaciones pasadas de mi familia con las siguientes generaciones hasta nosotros.

Bogotá es una ciudad de tradiciones y existen dulces típicos que no se pueden llamar postres pero que son pequeños manjares, se consiguen en el restaurante más antiguo de Colombia situado en la Calle 11 6-50 en el centro histórico llamado La puerta Falsa.

 Allí cualquier amante de los dulces se sentirá en el paraíso con éstas pequeñas golosinas que han endulzado por generaciones a Bogotanos y foráneos, solo mirar esas vitrinas de madera y vidrio evocan un tiempo pasado que traen recuerdos inolvidables.

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